He estado de compras... y he comprado tres cosas. Lo primero: una máquina de escribir. Acabaré el capítulo seis de mi novela y seremos millonarios. La segunda: una estufa. Aquí hay calor humano pero no basta... La tercera: un despertador... porque hay que introducir el tiempo en nuestras vidas... porque nos hace falta disciplina... sobre todo a mí... y porque será la única forma de cronometrar mi tiempo.
[Ópera Prima, Fernando Trueba, 1980]

jueves, 4 de agosto de 2016

En agosto, Julio

- Estoy releyendo a Stieg Larsson (que me está volviendo a gustar mucho),
- el otro día cogí en la biblioteca Sumisión de Michel Houllebecq (leí algo suyo hace años y no me entusiasmó, pero tengo mucha curiosidad por esta novela),
- y aún tengo pendientes algunos de los regalitos de mi cumple (he leído ya dos de ellos que me encantaron y los demás me están esperando)...

...Pero ya que estoy currando dando clases en la sierra y no voy a poder viajar 'de verdad' durante estas próximas semanas, he decidido dedicárselas a tutiplén al enorme Julio Verne...

No hay comentarios:

Publicar un comentario