He estado de compras... y he comprado tres cosas. Lo primero: una máquina de escribir. Acabaré el capítulo seis de mi novela y seremos millonarios. La segunda: una estufa. Aquí hay calor humano pero no basta... La tercera: un despertador... porque hay que introducir el tiempo en nuestras vidas... porque nos hace falta disciplina... sobre todo a mí... y porque será la única forma de cronometrar mi tiempo.
[Ópera Prima, Fernando Trueba, 1980]

domingo, 6 de septiembre de 2015

Nos observábamos el uno al otro

Nosotros, ella y yo, nos observábamos el uno al otro. Ella observaba a mi mujer y observaba nuestro matrimonio, y ambas cosas le gustaban. Observaba mis esfuerzos por ser escritor y no los entendía del todo. "Pero, ¿cuándo vas a conseguir un trabajo y a sentar la cabeza?", me preguntó en cierta ocasión. Observaba el hecho de que no tuviéramos hijos, y no opinaba al respecto. Observaba su vida y observaba la vida de mi mujer y la mía, y posiblemente no veía cómo una daba origen a la otra.

De Mi madre, in memoriam [1988] un hermoso librito de Richard Ford [1944- ] que leí el fin de semana pasado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario