La chica de la foto no lee, no nos engañemos. Pues anda que no me he echado yo veces así de femenina y evocadora debajo de un plátano del retiro, con un libro, enseñando la portada por si algún melancólico bohemio me decía "buenas tardes, señorita. Es de noche y sin embargo llueve", o algo. Pero no. La chica lee una y otra vez la primera palabra y sueña dormida. Cuando un escribidor se fija en su foto, ya no lee pues tiene presbicia.
La chica de la foto no lee, no nos engañemos. Pues anda que no me he echado yo veces así de femenina y evocadora debajo de un plátano del retiro, con un libro, enseñando la portada por si algún melancólico bohemio me decía "buenas tardes, señorita. Es de noche y sin embargo llueve", o algo.
ResponderEliminarPero no. La chica lee una y otra vez la primera palabra y sueña dormida.
Cuando un escribidor se fija en su foto, ya no lee pues tiene presbicia.